O1O.
Advertencia: Smut explícito y un mención de incesto. Si no te gusta puedes saltarlo. Tomen en serio la advertencia. No denuncien :(
(♡)
Esa noche, Yoongi bufó en varias ocasiones mientras esperaba a que fuera la hora de irse. HoSeok le había dicho que iría por su cuenta, así que no podía siquiera salir minutos antes, sino esperar pacientemente a las ocho.
No estaba preparado para lo que pasaría en casa de NamJoon. Tener sexo con su novio delante de su hermano y cuñado era simplemente bochornoso, además a él nunca le había causado mucha gracia ser corregido por NamJoon; en conclusión, dudaba disfrutar del todo esto.
Aun así, debía aceptarlo. HoSeok y él no podían seguir de esta manera y NamJoon tuvo razón en todo eso que dijo sobre su cobardía. No estaban actuando como hombres maduros, incluso si la masculinidad era aquello que ambos habían querido mantener. Que ironía.
Cuando marcaron las 7:45 decidió que era una buena hora para irse. Tomó sus llaves y celular para luego salir y subir a su moto. Manejó tranquilamente hasta la casa de su hermano y en menos de 15 minutos ya estaba ahí, tocando la puerta con los nudillos. JiMin le abrió con una sonrisa.
—Hola, Yoongi. Pasa, ya HoSeok-ssi llegó —dijo. Yoongi asintió y entró, cerrando la puerta y quitándose los zapatos.
Él siguió a JiMin hasta la sala, dónde NamJoon tomaba una cerveza en el sillón ancho y HoSeok una soda en uno de los muebles individuales. Yoongi saludó a su hermano con una mano y se acercó a HoSeok, el cual lo miró con una pequeña sonrisa y le ofreció gaseosa, Yoongi aceptó mientras se sentaba a su lado. Vio a JiMin tomar asiento junto a NamJoon, murmurándose cosas que no alcanzó a escuchar.
—¿Estás listo para esto? —le cuestionó a HoSeok después de devolverle la lata.
HoSeok se encogió de hombros.
—Quizás. «Estar listo» suena demasiado relativo, ¿no crees?
Yoongi sonrió por su comentario y le tomó la mano, acariciándole los nudillos con su pulgar. No sabía cómo HoSeok podía aparentar tanta serenidad, pero él no arruinaría eso haciéndole sentir nervioso.
—Perdón por no haber encontrado una solución y acabar orillándonos a esto —murmuró.
—Hey, no es tu culpa nada más —le reprochó—. Es como dijo NamJoon. La relación es de ambos, y fuimos inmaduros al no querer admitir nuestras inseguridades —suspiró, pero la sonrisa se mantuvo en su rostro—. Estamos aquí para solucionar eso, ¿verdad? Así que vamos a dejar de lado esas cosas y tratemos de disfrutar.
Yoongi le sonrió también y dejó un beso en su mejilla, asintiendo.
Un sonido húmedo, junto a algo parecido a un gemido, les sacó de su mundo.
Al mirar hacia el sillón, quedaron impactados al ver que NamJoon y JiMin se estaban comiendo la boca, con el mayor aprisionado bajo el otro cuerpo mientras le acariciaba la cadera a Namjoon y este le apretaba el trasero con fuerza, sacudiendo sus nalgas incluso encima del short.
Yoongi se sonrojó, HoSeok igual, ambos preguntándose si ya debían seguirlos o cómo.
—Uhm... no es por sonar inconforme ni nada de eso, pero... —habló primero, incómodo—. ¿Lo haremos aquí, en la sala?
Los vieron detenerse de forma abrupta, luego la pareja miró hacia ellos. JiMin con los ojos vidriosos y NamJoon con el ceño fruncido.
Su hermano mayor chistó con una sonrisa molesta.
—Tsk, se nos había olvidado que estaban aquí.
HoSeok y Yoongi casi se van de espaldas en su silla, se limitaron a reír rígidamente.
NamJoon se levantó primero y ayudó a JiMin a hacer lo mismo, luego los miró e indicó hacia las escaleras.
—Vamos al cuarto, Yoongi. Sígueme —espetó.
Yoongi se sobresaltó, pero dadas las circunstancias no dudó en acompañar a NamJoon, yéndose primero con él.
JiMin los vio irse para luego sonreír a HoSeok, el cual se mordía ligeramente el labio. Extendió una mano hacia él.
—Todo estará bien, vamos.
HoSeok le sonrió también de forma mucho más desganada y tomó su mano, ambos caminaron hacia la habitación con pasos lentos.
Al ingresar, las luces estaban apagadas, pero bastaba con la que entraba por la puerta que estaba abierta de par en par. HoSeok soltó un sorprendido jadeo al apreciar cómo NamJoon sostenía a su hermano desde atrás, apoyando el pecho en la espalda de Yoongi mientras sus manos jugueteaban debajo de la camiseta de este a la altura de los pezones. Yoongi lucía igual de anonadado, mirando hacia abajo con los ojos muy abiertos y los labios partidos, el color rojo cubriendo su rostro mientras que el de NamJoon era pura lascivia.
No pudo decir nada, porque pronto fue acorralado por JiMim contra la pared, el menor enterrando sus labios en la zona de su cuello, arrancándole un gemido agudo e inesperado.
La atmósfera cambió de inmediato. La tensión se confundía con ansias sexuales, y si bien la puerta se mantenía abierta, ambos sabían que la opción de volver ya no existía.
Namjoon sonrió mientras dejaba un mordisco en el lóbulo de Yoongi, escuchando su quejido.
—¿Es esto muy raro? —susurró en su oído—. Ser tocado por un hombre... Que además es tu hermano... ¿Te hace sentir mal? ¿Asqueado? —pellizcó uno de los pezones de Yoongi con un poquito de fuerza, otro ruido escapando de sus labios—. Contéstame.
—N-no, no da asco —murmuró apretando los ojos con fuerza.
NamJoon soltó una risita y después de lamer desde la oreja hasta el inicio de su camisa, lo soltó de golpe, haciendo que Yoongi diera un par de traspiés.
Miró a JiMin; su novio seguía jugando con el cuello de HoSeok mientras que este se mordía los labios y apretaba la tela del suéter de su bebé a la altura de la cintura. Era raro ver a su novio tocando a otro, pero la excitación de tener a dos lindos chicos manoseándose le ponía mucho más. Además, esto era necesario y blah, blah, blah.
—JiMin, trae a HoSeok aquí.
JiMin dejó una pequeña mordida en el hombro de HoSeok y asintió, tironeando a este hasta la cama y lanzándolo ahí.
HoSeok se quejó, aún algo perdido. Yoongi se ubicó a su lado, quedándose, mirando a los otros dos mientras compartían un beso húmedo y morboso, NamJoon volviendo a acariciar las nalgas de JiMin.
Con un hilo de saliva uniendo sus bocas al separarse, NamJoon les preguntó directamente. —¿Esto es desagradable?
Ambos negaron al mismo tiempo, aunque la vergüenza aún estaba presente.
—¿Y bien? ¿Qué esperan para empezar a tocarse también? —se burló el Min mayor, y sin esperar respuesta volvió a atacar los labios de su novio.
Yoongi los analizó con detenimiento, tragando saliva varias veces sin saber qué hacer.
Escuchó el roce de la tela con la piel. HoSeok se estaba desvistiendo con una mueca tímida, sin atreverse a mirar a Yoongi.
Cierto.
Yoongi descartó su camiseta, luego desabrochó sus pantalones y los bajo hasta los tobillos, pero ahí se detuvo, negándose a ser quién terminara desnudo primero.
Cuando HoSeok estuvo en ropa interior también fue que se miraron a los ojos. Pasaron unos segundos pesados, dónde el beso y los jadeos ajenos les retumbaban en los oídos. Finalmente, Yoongi perdió la paciencia y tomó los hombros de HoSeok (con un par de mordidas en ellos) para besarlo, aunque de manera suave, no como su hermano y cuñado.
HoSeok le siguió el ritmo, aumentando de a poco hasta que sus lenguas se tocaron y todo se volvió confuso y caliente, ambos entrando en el ambiente por fin.
Mientras se besaban Yoongi sintió un toque en su hombro; no le costó mucho averiguar que era NamJoon. Su hermano empezó a acariciarle desde los brazos hasta la cintura, repitiendo el proceso una y otra vez. Quizás lo hacía para que se relajara completamente, Yoongi no sabía nada.
Entreabrió los ojos cuando HoSeok se separó para soltar un suspiro. JiMin estaba besándole el cuello de nuevo, haciendo que HoSeok frunciera el ceño y apretara los labios para evitar gemir. Entonces eso quería decir que HoSeok tenía esa zona sensible y él no lo sabía.
—Eso es... Mira cómo JiMin descubre sus puntos erógenos. Memorízalos —NamJoon habló en su oído, dejando un beso en su nuca también para ocasionarle un escalofrío—. El cuerpo de la mujer es bello, sabes. Pero el del hombre también tiene sus atractivos. ¿No te parece excitante mirar cómo lo está tocando? ¿No te gusta la expresión de HoSeok? —consultó. Yoongi no pudo evitar asentir repetidas veces con la cabeza—. Hay tantos lugares dónde tocar para seguir viendo esa expresión. Lo sabes, Yoongi...
HoSeok escuchó por encima de los besos de JiMin que NamJoon estaba murmurando cosas. Abrió los ojos con lentitud, encontrándose con el rostro de Yoongi lleno de excitación y deseo mientras los miraba fijamente. Tragó saliva y volteó la cara, le daba un poco de vergüenza que otro chico lo tocara así, pero más pena le daba que Yoongi lo estuviera apreciando con tanta determinación.
JiMim se apartó de su sensible cuello, sólo para deslizar una mano desde el vientre hasta abajo y hurgar en su ropa interior. HoSeok soltó un chillido y colocó sus manos encima de la del menor, intentando detenerlo.
—¡No, espera! ¡Ahí no!
JiMim se rió, NamJoon también. Yoongi sólo lo miró con preocupación chocando en sus ojos. Después se acercó lentamente hasta quedar con sus rodillas rozándose y colocó sus manos sobre las de HoSeok, sonriéndole un poco en señal de que las quitara. HoSeok respiró profundo y lo hizo, sintiendo alivio cuando Yoongi también quitó la mano de JiMin.
No obstante, lo siguiente no lo vio venir ni de broma.
JiMin sonrió con autoeficacia cuando vio que Yoongi bajaba de golpe la ropa interior de HoSeok, dejando a la vista su erección bajo la mortificada expresión del chico.
Sintió gracia y quiso reír, pero prefirió ponerse de pie y, para no dejar solo a HoSeok en esa situación, se quitó toda su ropa, quedando desnudo ante la atenta mirada de sus amigos y la lujuriosa de NamJoon, el cual seguía apreciándolo como la primera vez que estuvieron juntos.
Llevó una mano a su propio miembro y empezó a acariciarlo de arriba abajo, soltando suspiros cuando poco a poco empezó a ponerse duro.
NamJoon también se desvistió con tranquilidad, aunque su pene ya estaba erecto, probablemente de solo mirarlo besar a HoSeok y ahora pajearse delante de ellos sin vergüenza. Lo vio lamer su mano para empezar a masturbarse también, todo con una sonrisa confiada que a JiMin le calentaba de sobremanera. El sonido de sus pieles siendo acariciadas llenó la habitación, pero era inútil si HoSeok y Yoongi sólo los miraban con inseguridad.
—¿Quieres aprender a hacer trabajo oral, HoSeok-ssi? —ofreció. El rostro de HoSeok se descompuso totalmente—. Puedo enseñarte. A puesto que a Yoongi le encantaría que se la chuparas un día.
Yoongi se quedó boquiabierto, incapaz de procesar esta faceta tan asombrosa de JiMin. Jamás imaginó que fuera tan descarado... Aunque quizás debió verlo venir, después de todo era la pareja de NamJoon.
—No... HoSeok no tiene que...
—Está bien —respondió este por su cuenta.
Oh, vaya.
JiMim primero se arrodilló entre las piernas de HoSeok, dejando en claro que primero se la chuparía para mostrarle cómo se hacía. HoSeok no dijo nada en contra, NamJoon seguía pajeándose con tranquilidad y su sonrisa entretenida en la cara, así que a Yoongi no le quedó de otra más que ver a JiMin tragarse la polla de HoSeok hasta el fondo y empezar a hacerle la mamada, con HoSeok gimiendo un poco mientras fruncía el ceño.
No pensó que fuera posible que le gustara ver esto, después de todo era su novio siendo chupado por otra persona, pero a decir verdad era realmente excitante ser testigo. Antes de darse cuenta su mano estaba acariciando su propia erección sin apartar los ojos de la boca de JiMim alrededor de la polla de HoSeok.
—Estás haciendo eso muy rápido —NamJoon volvió a pegarse a su espalda, su mano colocándose sobre la de Yoongi para detener sus movimientos—. No puedes acabar primero que él, menos si no se han tocado casi. Hazlo así —Hizo movimientos de arriba a abajo lentamente, rodeando el glande con su pulgar.
Yoongi se mordió el labio inferior y asintió, imitando las indicaciones de NamJoon conforme escuchaba la polla de HoSeok salir y entrar de la boca de JiMin. Todo era tan caliente...
—JiMin... si sigues haciendo eso... —dijo HoSeok con dificultad, tratando de apartar al chico de su pene. JiMin chupó una última vez antes de sacárselo de la boca y mirarlo con atención.
—¿Ya? —HoSeok asintió con vergüenza—. Está bien —miró a NamJoon y YoonGi, terminando por sonreír ligeramente—. Así que... ¿qué opinas de hacérselo a Yoongi?
Pasando saliva, HoSeok también miró al otro par, sintiendo algo de recelo por la atención que estaba recibiendo Yoongi por parte de su propio hermano.
—Sí, de acuerdo.
Ambos se pusieron de pie para acercarse a los Min, quienes se detuvieron al verlos aproximarse. Fueron empujados de espaldas a la cama y así poder recibir a HoSeok y JiMin entre sus piernas, cada uno delante de la polla de su respectiva pareja. NamJoon apreció cómo ambos cogían los penes y empezaban a acariciarlos, HoSeok con mucho más torpeza que JiMin, obviamente. Sin embargo, a Yoongi no pareció interesarle su inexperiencia, pues con unas cuántas caricias ya estaba jadeando sin dejar de mirar a HoSeok.
JiMim fue el primero en empezar con su trabajo, se metió el pene de NamJoon a su boca e hizo lo mismo de siempre, sin embargo, su mano desocupada viajó a la cabellera de HoSeok y lo empujó de golpe a la polla de Yoongi, haciendo que se la tragara sin ningún aviso.
NamJoon gimió con sólo apreciar esto, empezando a mover la cadera para enterrarse por su propia cuenta en la boca de su novio. No quitó la mirada de HoSeok, de sus agrandados ojos que desbordaban asombro mientras trataba de tragarse toda la extensión de su hermano, mismo que estaba apretando los dientes y el hombro de NamJoon con una de sus manos. Lo estaba disfrutando, así que todo estaba marchando de maravillas.
En algún momento Yoongi se volvió un poco loco y jaló a NamJoon para que lo besara en la boca, lo cual lo sorprendió bastante, pero no lo suficiente como para rechazar el beso. Así que se comió la boca de su hermano mientras los otros dos se entretenían tragándose sus pollas.
NamJoon definitivamente estaba amando su idea de una orgía. Ya ni siquiera recordaba porqué estaban haciendo esto para empezar.
HoSeok se separó de la polla de Yoongi apenas JiMin aflojó un poco su agarre. Se apresuró a tomar aire a montones, pues las arcadas por tener algo tan grande y grueso golpeando constantemente su garganta era definitivamente más difícil de lo que parecía. Se limitó a acariciarla con ambas manos mientras se relajaba un poco, admirando el beso que estaban compartiendo ambos hermanos con JiMin divirtiéndose mientras con la polla de NamJoon.
Diablos, su primera vez realmente iba a ser en una orgía.
Qué orgullo.
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